Esta receta es ya todo un clásico en muchos hogares, pero nunca había probado a hacerla en casa. Aprovechando que los pimientos italianos que venían en mi cesta de verduras eran bastante rectos, me animé por fin a hacerla (con unos retorcidos sería difícil rellenarlos).

Tan simple y bueno como hacer una tortilla de patata, ¡pero sin riesgo de que se caiga al darle la vuelta!

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Ingredientes (2 personas)

• 4 pimientos verdes italianos
• 3 patatas (la cantidad depende del tamaño de los pimientos)
• 2 huevos (ídem)
• 1 cebolla
• Aceite y sal

Preparación

Pela y corta las patatas y las cebollas en trozos pequeños, para que sea fácil rellenar los pimientos. Fríelas en una sartén con aceite hasta que estén doradas y tiernas.

Mientras se fríen, corta la tapa de los pimientos y vacíalos bien de pepitas, con cuidado de no romperlos.

Precalienta el horno a 200ºC con calor arriba y abajo.

Bate los huevos, añade sal y mezcla con las patatas y cebolla fritas.

Rellena con una cuchara los pimientos hasta el borde, y colócalos en la bandeja del horno. Consejo: algunos pimientos, por su forma, se inclinaban y perdían el relleno. Mi solución fue levantarlos un poco apoyándolos en un rulito que hice con papel de aluminio.

Hornea los pimientos durante unos 30 minutos aproximadamente, hasta que veas que el interior está cuajado y los pimientos están asados.

Puedes servirlos enteros o cortarlos a rodajas, ¡tú decides!