Crema de calabaza

Esta semana en la cesta de L’Horta a la Porta venía una estupenda cucurbita moschata, esto es, una calabaza de las de tipo cacahuete (o violín, o campana, o butternut in english). Con esta calabaza damos el pistoletazo de salida a todas las que están por venir en el invierno.

La calabaza se puede utilizar en cocina en las mismas preparaciones que se utiliza su hijo el calabacín pero, como muchas de las verduras de invierno, tiene una piel bastante fuerte y cuesta más de pelar.  Pero no es para tanto:

El paso cero es proveerte de un cuchillo grande que corte bien. Y después:

• Corta las dos puntas de la calabaza.

• Pártela por la mitad.

• Apoya la parte plana grande sobre la tabla y pasa el cuchillo de arriba hacia abajo.

• Repite con el otro trozo.

Y luego ya le quitas las pipas, la troceas y la usas a conveniencia.

Sugerencias:

• Ponla a hervir con agua 20 minutos o hasta que la pinches y esté tierna. Escurre el agua, tritura, ponle sal + tu especia favorita (cilantro para mí) y disfruta de un cremoso puré. ¿Te parece aburrido? Añade dados de manzana, o mezcla con nata, o polvos de curri. O todo lo anterior a la vez.

• Haz rodajas finas y fríelas cual patata, hasta que estén doradas y crujientes. Se pueden comer como aperitivo mojándolas en una salsa buena o en ketchup malo. También las puedes mezclar con huevo batido y hacer una tortilla de calabaza.

• Tápala con film y mete en el microondas a máxima  potencia durante 10 minutos y ya tienes una calabaza asada express. Ahora que está blanda la puedes usar para mezclarla con garbanzos, ajo y cominos y hacer hummus, para añadirla a la masa de un bizcocho o para hacer unos buñuelos, si te atreves.

¿Cuál es vuestra forma favorita de usar las calabazas?